Llegó el calor y no se nos ocurre otra cosa que pintar las paredes de uno de los dormitorios. Sí, hemos sudado la gota gorda, pero en un día tenemos las paredes pintadas y con el efecto que estabamos buscando. Una de las tendencias en el mundo de la decoración que más se ha consolidado en los últimos años es dar más protagonismo a las paredes. Si repasamos revistas, blogs o programas de decoración veremos que los papeles pintados, los estucos, falsas ventanas, vinilos… se han impuesto como una forma de reclamar las miradas hacia las paredes. Y en este caso queríamos dar un cambio de imagen al dormitorio y a la vez conseguir un efecto desgastado, que no fuera demasiado exagerado, pero que llamara la atención. Aquí tengo que hacer una llamada de atención. Creo que lo más complejo de estos efectos es que no sabes cuándo parar. Es decir, sacar el rodillo a veces da mucha pereza y más con el calor, pero cuando lo sacas, no puedes parar y ya que te has puesto… terminas pintando el pasillo, la otra habitación, la entrada…. Hoy os queríamos contar nuestra experiencia y dejaros un paso a paso para pintar una pared con efecto desgastado combinando tres colores: blanco, marsala y gris. Pero nos hemos dado cuenta de que el tema es largo, con un montón de trucos y que no podemos olvidar cuestiones como el gotelé!!!!! Nosotros no tenemos gotelé en las paredes, pero sabemos que es algo que preocupa a muchas personas y por eso hemos recurrido a un profesional de Reparalia para que nos ayude.

Cómo elegir la pintura para nuestras paredes
Esto es un factor fundamental para no llevarnos sorpresas desgradables al pintar paredes. No es lo mismo pintar una fachada, que un dormitorio o un baño. Tenemos que tener muy presentes el desgaste que puede sufrir esas superficie para adquirir una pintura acorde y que nos dure. Hay tres elementos esenciales: humedad, exposición a los rayos solares y la variación de temperaturas. Por ejemplo, tal y como nos apunta el profesional de Reparalia hay una importante diferencia entre interior y exterior: “ En el caso de que sea una fachada, lo mejor es la pintura ‘pétrea’. Aunque podemos emplear una pintura plástica de exterior de buena calidad. Este tipo de pintura se encuentra fácilmente en cualquier centro especializado de pintura a un precio más barato que la pétrea y tiene resultados similares siempre que sea de calidad. Si es una zona con humedades, yo recomendaría una pintura temple ya que es transpirable. Esta pintura ayuda mucho a espacios como los baños o la cocina, donde se produce una gran condensación de agua. Como consejillo, además, si tu baño o cocina transpiran mucho, lo mejor es dejar un poco abierta la puerta para evitar que haya un excesivo contraste de temperaturas“.

Cómo elegir los colores de las paredes
Este tema aunque no lo parezca es complejo porque aunque existen algunas reglas hay algo que se llama gusto, que cada uno tiene el suyo y ahí es complicado meterse. Más allá de lo que nos guste a cada uno el prfesional de Reparalia nos ayuda a orientarnos con algunos consejos a tener en cuenta:
- El color de la pintura de nuestras paredes debería ir en armonía con la decoración de la casa y el estilo en que la hemos decorado. Por ejemplo, si tenemos unas cortinas naranjas, no es conveniente pintar en rojo.
- Si tenemos la suerte de tener las habitaciones sin amueblar (un espacio virgen) los criterios a tener en cuenta son algo diferentes. En este caso, habrá que fijarse en el tamaño de la habitación y la luz de la que dispone. A mayor espacio y mayor luminosidad, podemos dar al color una intensidad mayor. Sin embargo, si los espacios son reducidos y con poca luz (por ejemplo, un pasillo) independientemente del color escogido, los tonos deberían ser mucho más claros. Esto es así porque visualmente, los colores fuertes y con mayor tonalidad tienden a empequeñecer los espacios.

Cómo quitar el gotelé
Aquí recurrimos al profesional de Reparalia porque como os decía nosotros tenemos la gran suerte de no tener gotelé en las paredes de casa. Cuando compramos la vivienda hicimos obra y Rubén, que fue el encargado de tirar azulejos, ventanas, puertas, saneamientos, suelo, hasta una palmera… y hacerlo todo nuevo luchó intensamente con el gotelé de todas las paredes.
Os dejo toda la información que nos ha pasado el profesional de Reparalia, que creo está muy completa y os puede ayudar.
Si la pared está pintada con pintura al temple (más fácil):
Para retirar el gotelé vamos a necesitar: un cubo con agua, una brocha, una espátula y un rodillo.
Pasos a seguir:
- Aplica el agua sobre la pared con la brocha y rodillo como si estuvieras pintando.
- Pasados unos minutos, cuando la pared esté húmeda, raspa con la espátula con mucho cuidado para llevarte solo la gota y no partes de la pared.
- Una vez quitada la gota, tendrás que aplicar aguaplast –se puede conseguir fácilmente en cualquier tienda de pintura- para eliminar las imperfecciones de la pared. Y luego ya podrías aplicar de nuevo la pintura.
Consejo importante del profesional de Reparalia:
“Si es la primera vez que retiras el gotelé de la pared es preferible que seas prudente con el uso de la espátula. Pasarse con esta herramienta va a suponer más trabajo para dejar la pared lisa y perfecta. Cuanto más levantes de la pared, más irregular va a quedar y más relleno vas a tener que usar para nivelar las zonas afectadas”.
Si la pared está pintada con pintura plástica (más difícil):
Para retirar el gotelé en paredes pintadas con este tipo de pintura vas a necesitar: una llana, una espátula y un cubo para hacer el aguaplast.
Pasos a seguir:
- Mezcla el aguaplast – que son polvos- en el cubo con agua hasta conseguir la textura idónea: ni muy blanda ni muy dura.
- Aplica el ‘aguaplast de relleno’ entre dos y tres manos sobre la pared con gotelé mediante una llana. Para las zonas pequeñas – por ejemplo entre el marco de una puerta y un enchufe- utiliza una espátula.
- Una vez cubierta toda la gota con aguaplast, tocaría el trabajo más pesado y que más mancha: pasar la lija fina para igualar toda la pared y eliminar la gota.
- Una vez realizado esto, tocaría pintar.
https://www.youtube.com/watch?v=X3bWOYXT7Uw
Cómo elegir brochas y rodillos
Si no lo sabías, existen rodillos para paredes sin gotelé y para paredes lisas. Así que cuando vayas a pintar elige según el estado de tu pared. Para nuestro trabajo nosotros hemos elegido rodillos de teflón, un material que descarga más pintura sobre la superficie y por tanto hace que ahorres pintura (que no se queda en el rodillo, sino que va a la pared) y tiempo. Además, hemos usado una cubeta de Nespoli que nos ha parecido cómoda y práctica. Cuando pintas paredes es bueno para tu espalda, te lo va a agradecer, emplear cañas que permiten que llegues con el rodillo a las zonas más alejadas. Con esta cubeta puedes coger pintura y escurrir sin necesidad de agacharte y dejarte los riñones. Cuando pintamos paredes podemos combinar rodillos de diversos tamaños: los pequeños, para acercarte a los enchufes y esquinas, y los grandes para la parte más amplia de la pared. Como ya sabéis somos muy cotillos y teníamos muchas ganas de probar el Roll Matic, un nuevo rodillo de Nespoli con funda, que hace poco que ha salido al mercado y que nos parece un gran invento. La funda te permite guardar el rodillo de un día para otra sin necesidad de lavarlo. De esta forma, si no terminas el trabajo, no desperdicias pintura lavando, lo metes en la funda y puedes seguir cuando quieras. La pintura se mantiene fresca hasta tres meses. Si váis a pintar en casa, os aconsejamos que hagáis una pequeña inversión de tiempo para ver las diversas opciones que hay en el mercado. El mundo del rodillo y la brocha ha cambiado mucho y merece la pena cotillear para encontrar nuevas herramientas que mejoran mucho nuestra experiencia con la pintura evitando manchas, esfuerzos innecesarios y ahorrando tiempo.

Mañana os mostramos paso a paso nuestra pared decorada con un efecto desgastado. A ver qué os parece…