Vitrina decorada con chalk paint y papel pintado

Como os contamos hace unos días, la semana pasada montamos un ambiente deco en la tienda de Getafe de Leroy Merlin. La idea era ofrecer ideas con las nuevas tendecias para este verano. Una de las líneas deco para este año mezcla colores pastel, verdes y azules, con elementos de inspiración floral y todo lo que tiene que ver con la naturaleza: ramas, hojas, flores… Y por supuesto, palmeras. Lo sé, estamos muy pesados con las palmeras, pero salid a la calle y echad un ojo a los escaparates… Este verano nos van a inundar de palmeras. Y si son tan bonitas como el papel Jungla de Leroy Merlin, pues nos encanta emplearlo para nuestros muebles. Entre los trabajos que realizamos se encuentra nuestra vitrina de madera y cristal. Una pieza de mi primo Jorge, que hemos dado un lavado de cara para la ocasión. Os mostramos el paso a paso para conseguir una vitrina decorada con chalk paint y papel pintado. Un proyecto sencillo, que creo se puede aplicar a cualquier mueble en casa para lograr una pieza personalizada, original y única. ¿Qué os parece el resultado?

Paso 1: Limpieza

Para conseguir una vitrina decorada con chalk paint es fundamental una buena limpieza. Primero, porque hay que quitar suciedad. Aunque a simple vista parezca que no hay polvo, cuando un mueble es muy antiguo tenemos que emplearnos a fondo, ya que en muchos casos la grasa y el polvo se han ido metiendo en la madera poco a poco hasta cambiar el color de la pieza. Además, tenemos que tener en cuenta el sangrado del barniz. Tras la Guerra Civil en nuestro país los barnices que se empleaban tenían una composición muy química que hace que tiñan mucho la madera y que cuando los pintamos con chalk paint, una pintura muy porosa, puede afectar al color. Es decir, que nos puede pasar que al pintar directamente sobre el mueble con un color claro nos encontremos que se amarillea o se transforma en rojizo. Eso es lo que se llama sangrado. La semana que viene haremos un post sobre este problema, que se soluciona facilmente. En el caso de la vitrina, la limpieza con acetona y un estropajo fue suficiente para lograr que la pintura de tiza agarre sin problemas y a la vez el barniz original no afecte a la nueva capa de color. Dimos una buena pasada con el estropajo de aluminio y acetona pura. Con un trapo retiramos y secamos.

Paso 2: Pintamos

Este año se lleva la combinación de azul y verde pastel. Así que teníamos que usarlos porque combinan perfectamente mientras aportan luminosidad a la pieza. Azul para la parte de afuera y verde para la parte de dentro. Ya que la idea era forrar la trasera del mueble con papel de palmeras de color verde. Para este mueble dimos dos capas de pintura y lijamos entre una y otra para que quedara bien suave. Usamos rodillos de Nespoli para la parte de afuera y brocha con forma de lápiz de la misma marca para las zonas más estrechas.

Paso 3: Damos cera

Con la ayuda de una brocha aplicamos cera por toda la pieza pintada, dejamos que repose unos minutos y frotamos con un trapo limpio para sacar brillo.

Paso 4: Colocamos el papel en nuestra vitrina decorada

Nos encantan los muebles antiguos, pero también nos gusta darles un aspecto más moderno. Podemos hacerlo a través de pequeños detalles como los tiradores, colocando transfer o servilletas. Para nuestra vitrina eligimos el papel Jungla de Leroy Merlin. Fue amor a primera vista. Además, usar papeles claros aporta luz a la pieza y da más profundidad. Lo que teníamos claro era que la vitrina no iba a pasar desapercibida.

Tomamos medidas y cortamos el papel

Forrar la trasera de un mueble es una tarea realmente sencilla. Podemos recortar una madera muy fina con las medidas y colocarla para darle más cuerpo al papel o podemos pegarlo directamente. Con la vitrina nos decantamos por la segunda opción: pegar el papel sobre la madera. Era lo más rápido y sencillo.

TRUCO PARA USAR EL PAPEL PINTADO

Tomamos medidas y nos encontramos con un pequeño problema. Necesitabamos dos láminas para cubrir todo el ancho del mueble. ¿Y cómo las casamos? Lo habitual es extender el papel cortar una lámina, poner el rollo al lado e ir moviendo hasta que cuadremos el dibujo para poder cortar la segunda lámina. Con la vitrina, no encontrabamos ese punto y como alternativa lo que hicimos fue cortar una lámina que ocupara el fondo de la vitrina de arriba a abajo. Un rectángulo. Y sobre el borde de ese rectángulo colocamos otra lámina de papel, pero en esta habíamos seguido el perfil de las hojas y las palmeras.

Aplicamos una capa de pegamento para papel pintado de Ceys. El pegamento se da en el papel con un rodillo para asegurarnos de que no queda nada de papel sin pegamento y que la capa es homogénea. Ponemos la lámina en la trasera y con las manos presionamos para que se quede bien agarrada. Una vez pegada, aplicamos pegamento a la lámina que hemos recortado y la colocamos de tal forma que la parte recortada quede superpuesta sobre la primera lámina que hemos pegado. Así no se ve la madera y no se notan los cortes del papel.

Como es viernes nos sumamos a los Findes Frugales de Marcela. Os invitamos a visitar su blog y cotillear todas las propuestas chulas de los participantes.