Trucos para pintar con chalk paint

Volvemos con un post un poco raro sobre cómo pintar con chalk paint. Dejamos a un lado los tutoriales para tratar de responder a multitud de preguntas relacionadas con pintar con chalk paint o pintura de tiza. Sobre este tema creemos que en cierto sentido se ha difundido la idea de que la pintura de tiza es casi milagrosa. No necesita preparar la superficie, agarra a la perfección, sólo una capa, efecto vintage… No queremos romper un mito, pero si nos gustaría que cuando uséis la chalk paint en casa la experiencia sea buena y os deje con ganas de seguir tuneando muebles en casa. Más allá de las marcas, que es algo en lo que no vamos a entrar, deciros que la chalk paint puede tener resultados extraordinarios, pero que también puede variar mucho del tipo de mueble con el que estemos trabajando. Una pieza necesita ciertos cuidados y otra, posiblemente necesite otros diferentes. Hoy queremos hablar del sangrado (problema que surge mucho con los muebles de los años cincuenta, sesenta y setenta), del rodillo, el lijado y el acabado. Os dejamos algunos trucos para pintar con chalk paint en casa.

Pintar con chalk paint: Sangrado vs imprimación

¿Qué es el sangrado? En España nos encontramos muchos muebles de los años cincuenta, sesenta y setenta que nos complican un poquito la labor de cambiarlos de color. Para protegerlos se usaron unos barnices con una acción colorante muy potente. Al usar la pintura de tiza, especialmente en colores claros, nos podemos encontrar que al dar una capa de pintura de tiza se vuelve amarilla o rosa. Eso es lo que se llama sangrado. Cuando el barniz supura y colorea las capas de chalk paint que estamos aplicando encima. Tenemos que tener en cuenta que la chalk paint es una pintura que tiene mucho yeso, lo que mejora su adherencia pero también hace que sea muy porosa y que chupe el colorante del mueble. No sé si se aprecia con claridad en la foto. A pesar de que aplicamos el mismo color blanco en la madera, en una de las zonas el blanco se volvió rosa.

¿Cómo evitamos el sangrado?

Tenemos dos formas de tratar de evitar esa contaminación de colores: una es usando imprimación y otra es haciendo una buena limpieza al mueble. Sobre la imprimación hemos hablado varias veces. Es un tipo de pintura que sirve para preparar la superficie antes de pintar. Con ella logramos que la pintura agarre mucho mejor y que dure más. Existen imprimaciones específicas para metal, paredes, plástico… Y existen imprimaciones universales. Podemos aplicarla con brocha, rodillo o pistola, pero también podemos dar imprimación con spray. Además, hace que usemos menos pintura, ya que las superficies muy porosas chuparán menos pintura una vez que hemos empleado primero imprimación. Sé que puede parecer que os estoy dando más trabajo, pero en muchos casos dar una o dos capas de imprimación es una inversión de futuro. Si alguna vez, habéis pintado las paredes de casa y en pocos días véis que se levanta la pintura posiblemente sea porque la pared no estaba bien preparada con una buena imprimación.

Imprimación para pintar con chalk paint

Os dejamos un vídeo sobre qué es la imprimación por si os pueden surgir dudas de este producto que nos parece tan útil.

Os dejamos el resultado en una cómoda en la que hemos aplicado la imprimación antes de pintar con chalk paint.

Os recordamos que tenéis acceso libre y gratuito al pequeño curso online que hemos elaborado para que podáis ver todos los pasos ensenciales para renovar un mueble de madera en casa. Os dejamos un breve resumen y podéis visitar el post donde os detallamos todos los contenidos del curso online.

Sobre la limpieza de los muebles antes de pintar con chalk paint. Para mí es la parte más latosa de todas. Una buena limpieza es imprescindible para que la pintura agarre bien y tengamos un buen acabado a medio y largo plazo. Pero a la vez, es tedioso. Para limpiar un mueble podemos usar un estropajo metálico alcohol, acetona o amoniaco. Os recomendamos siempre protegeros la cara con mascarilla y las manos con guantes. Una vez que hemos pasado con fuerza el estropajo (no os preocupéis que el mueble no se raya porque estamos retirando la suciedad y el barniz) pasamos un paño húmedo para quitar los restos de los líquidos que hemos usado para la limpieza.

Pintar con chalk paint: ¿brocha o rodillo?

Todo depende del resultado que estemos buscando. Si queremos una capa de pintura super lisa, el rodillo es el mejor aliado junto al spray. Si lo que queremos es un acabado más rústico o envejecido, podemos coger la brocha. Pero eso sí. Siempre hay que elegir la herramienta adecuada. La brocha para la pintura de tiza tiene que tener el pelo largo y ser muy suave. Eso nos ayudará a que se noten menos marcas en la capa de pintura. Si pintamos con rodillo, tenemos los rodillos de teflón que nos van a servir para dar una capa uniforme sin las marcas de los rodillos de espuma.

Cuando la pintura es muy espesa

Nos podemos encontrar que la pintura de tiza es muy espesa. Para rebajarlas podemos añadir agua, pero nunca en el bote original. Si vamos a pintar con brocha, a veces con humedecer un poco la brocha es suficiente. Si lo hacemos con rodillo, ponemos un poco de agua en la cubeta y mezclamos la pintura hasta conseguir que el rodillo corra sobre la superficie con facilidad. Si vemos que salen burbujas, es que nos hemos pasado con el agua. Si vemos que al pasar el rodillo quedan como pegotones, entonces necesitamos más agua.

Cuando salen burbujas

Como decía la chalk paint suele ser muy densa. Hay que removerla bien antes de usarla, pero cuidado. Empelar un palo para mover la pintura supone introducir aire y eso puede hacer que al aplicarla nos encontremos con burbujas. Para mejorar el acabado y evitarlo podemos usar agitadores de pintura que van a hacer que se mezcle a la perfección todo el producto. La capa aceitosa que tenemos en la superficie tiene que quedar bien mezclada con todo el producto del fondo que suele ser mucho más denso.

Mejor dos capas, que una gruesa

Cuando pintamos con rodillo lo mejor es dar una capa homogénea que cubra toda la superficie, pero que no sea excesivamente gruesa. Si aplicamos la pintura y volvemos a insistir con el rodillo podemos encontrarnos que más que cubrir lo que hacemos es llenarnos la capa antes de que agarre.

¿Lijamos?

Siento decir que si lo que estamos buscando es un acabado liso, nos va a tocar lijar entre capa y capa de pintura. La chalk paint tiene mucho yeso y veremos que sale bastante polvo al lijar. Os recomendamos emplear una lija de grano muy fino para no llevarnos mucha pintura, pero a la vez retirar las posibles marcas de la brocha o el rodillo.

¿Cera o barniz?

Nos encanta la chalk paint y nos enamora su acabado mate vintage, pero hay que protegerlo. Para muebles que tienen mucho uso es imprescindible dar barniz para preservar la pieza. Nos han escrito bastantes personas con dudas sobre si dar sólo cera o dar barniz. Ahora mismo en muchos trabajos se combinan los dos productos. Primero, damos cera, dejamos que seque un día o dos y luego, rematamos con barniz mate incoloro.

Os dejamos un vídeo del antes y después de una mesilla decorada con chalk paint. Así podéis ver cómo limpiar la madera y pintarla con pintura de tiza.

Mesilla decorada con chalk paint.