A veces necesitamos proyectos que sean rápidos y sencillos. Si piensas en cambiar el aspecto de los azulejos de la cocina, pero no sabes cómo hacerlo o simplemente no te convence tener que hacer obras, te mostramos unas pegatinas que a nosotros nos han enamorado. Aviso que no sólo parecen azulejos auténticos en las fotos, también en persona. Como siempre, os dejamos un vídeotutorial de nuestro canal, sobre estas pegatinas, que imitan baldosas hidráulicas.
Materiales para usar pegatinas que imitan azulejos
Los materiales son muy sencillos porque para colocar estas pegatinas sólo necesitamos limpiar bien la superficie:
- Desengrasante: Hay que asegurarse de limpiar bien la pared antes de poner las pegatinas.
- Pegatinas: Estas pegatinas de la marca Artemio vienen en paquetes de cuatro con diversos diseños. Están disponibles pegatinas que imitan azulejos de diversos tamaños y colores. En nuestro caso seleccionamos las pegatinas con los colores más vivos. Son pegatinas específicas para cocina, lo que significa que están preparadas para aguantar altas temperaturas y situaciones de mucha humedad.
Paso 1: Limpiar la pared
Si queremos asegurarnos de que las pegatinas se adhieren sin problemas, es fundamental limpiar muy bien los azulejos. Nosotros hemos aplicado un quitagrasa que mejora el agarre de la superficie.
Paso 2: Creamos unas guías
Es importante que cuando vayamos a colocar las pegatinas tratemos de que quedan bien rectas. Si vemos que la extensión de la cocina es muy grande y no tenemos nada que nos pueda servir de referencia, podemos con una regla dibujar unas líneas rectas, que nos ayuden. En nuestro caso, como las pegatinas iban pegadas justo en la esquina, no nos hacía falta tomar medidas.
Paso 3: Colocamos las pegatinas
Retiramos la lámina de la parte de atrás y podemos pegar las pegatinas en los azulejos.
Trucos a tener en cuenta
Os contamos nuestra experiencia con las pegatinas por si os facilita el trabajo:
- Cuando colocamos las pegatinas tenemos que tener en cuenta que se pueden retirar facilmente si lo hacemos enseguida. Si vemos que no queda recta, podemos levantar la lámina y volver a ponerla. Pero no debemos de dejar que pase mucho tiempo, porque entonces nos costará despegarla y puede deformarse.
- Para que las pegatinas no se tuerzan y logremos el mejor resultado podemos ir jugando con los milímetros de color blanco que tienen en los laterales. Podemos solapar una pegatina con otra y así no se ven los cortes, ganando más realismo la composición.
- No es necesario tapar las juntas originales de la pared. Las pegatinas son lo suficientemente gruesas como para que no se note la separación entre los azulejos que quedan debajo.
En un par de horas podemos cambiar el aspecto de una zona de la cocina empleando estas pegatinas que nos facilitan la transformación de la cocina sin problemas.
Un comentario
Estuve mirando para mi cocina, pero necesitaba tanta, y eran tan caras (aunque bellísimas), que opté por la pintura.